Guttermouth
Magazine o Monday
Gula
Rotten
Por Diego Álvarez Rex
Foto Manuel Castillo @MrCastleManu
Cuando suscitan conciertos como el del pasado sábado en el Foro Alicia, es difícil no poner en segundo plano cualquier otro al que se haya ido en el año como totalmente olvidable, pero en general, así de intensos deberían de ser todos los shows en realidad.
Guttermouth es una banda de “Punk Rock Noventero” que al igual que muchos otros que este año visitaron México por vez primera como una especie de lista de deudas por pagar, aplastaron el concepto de la nostalgia con un sencillo y contundente show de moshpit, circle pit y compañeros voladores; ¿cuántos años llevan sin sacar un disco? ¡Qué más da! Desde horas antes de las nueve ya había suficiente gente para los sets de Rotten (mención honorífica por su atinado humor) y Magazine o Monday que, dando paso a Gula, tenían la pista más que caliente para los norteamericanos.
Sin perder el tiempo, los californianos que los años no les han hecho ninguna caricia, se colocaron sobre el entarimado al mismo tiempo que un puñado considerable de cervezas y, con la característica personalidad de Mark Adkins (que parece literalmente en medio de un ataque de ansiedad, tartamudeando y mirando para todos lados), arrancaron sin coartada con “Lipstick”, “Do the Hussle”, “Where Was I?” y otras varias canciones que de su velocidad uno apenas y podía contarlas.
La banda sonó impecable, y aunque Mark balbuceaba al micrófono cosas sobre México, pedir canciones de las que ya ni se acuerdan, o preguntarle a cada uno su nombre, la postal que será difícil de borrar era cómo el Foro Alicia estuvo vuelto loco de principio a fin, cosa que a los elementos de seguridad los agarró de bajada ya que no contaban con los clavadistas del público que canción tras canción volaban del entarimado, teniendo en un punto a los de seguridad ya mejor sentados en los monitores para obstaculizar el acrobático ritual.
Venga, que sonaron “End On 9”, “Hit Machine” y “Bruce Lee vs the Kiss Army” como estufa para palomitas en un sartén, con cada uno de los asistentes volando por la sala; cerca del final, Mark invitó a tomar en cuenta que la banda sigue girando por el gusto de hacerlo alegando “No ganamos mucha plata de esto, realmente”, y ciertamente la expresión de la banda denotaba que disfrutaban cada segundo del show.
Después de una hora de show, la banda se retiró del entarimado esperando una enorme ovación que los hiciera regresar pero, la gente estaba tan cansada que mejor prefería ahorrar energías y que Guttermouth regresara por cuenta propia, cosa que no sucedió para confusión de varios, pero alivio para otros que claramente ya no estaban para esos “trotes”.
