Entrevista /// Torreblanca

Por moonman y Josuelo /// Fotos:BigIdeas (OzCorp)

Tuvimos una muy larga plática con Juan Manuel Torreblanca y “El Abuelo” Zavala donde nos platicaron sobre los dolores que sufrieron al hacer Bella Época y la forma en que fueron conformando esta interesante alineación que si logran consolidar llegarán muy lejos.

De ser una banda propuesta han crecido mucho al abarcar géneros que no habían sido explorados en la escena independiente mexicana. Eso pudo haber sido un obstáculo en un incio pero a final de cuentas es algo auténtico que los distingue
JM: Creo que a mí me cuesta trabajo porque hay una parte de mi que es como el niñito ñoño del salón de secundaria que quiere ser como los que si son “cool” y que quiere que lo acepten y ser amigo de todos. Musicalmente nunca he sido así porque mi voz es rara al igual que mi forma de componer. Si me hubiera obligado a sonar como a The Strokes, Interpol o algo a la moda, creo que hubiera sido muy desastroso.
Acepté mi forma de cantar y nadie me quiso cambiar. También hemos aceptado los gustos y sonidos de cada quien de una manera espontánea y con mucho respeto y eso poco a poco ha ido enriqueciendo el sonido de toda la banda. Al principio daba mucho miedo no sonar a muchas cosas que igual nos garantizara una ilusión de que nos iría muy bien. Al final siento que las decisiones que se han tomado, sobretodo las que hicimos con Quique en Bella Época han sido afortunadas.
Se nos ha clasificado dentro de un género pop, se nos hace raro porque muchas veces en este país se entiende el pop como Anahí o en otros casos como una propuesta alternativa más hacia lo hipster donde la voz está muy escondida por medio del reverb. Entonces una parte de mi decía que había que esconder mi voz al ponerle muchísimo reverb, pero Quique viniendo de Café Tacvba -que tiene un gran vocalista donde siempre se entiende y se escucha perfecto- me dijo: “No, tu voz va enfrente y limpia”, fue así como ¿en serio?. Eso me ayudó a aceptar mi voz al ser la que le toca contar la historia y que para eso estamos haciendo canciones con letras que buscamos trasmitir algo a través de eso, si no mejor me pongo hacer música instrumental.

Cuando fueron nuestra propuesta en 2010 con “Defensa” al principio había un rechazo por la voz, pero al desmenuzar las canciones se escuchan unas estructuras musicales muy interesantes por la variedad de instrumentos
JM: Nos gusta explorar la parte de el arreglo, espero que con el tiempo también puedan salir mejores canciones que las de ahora (no las considero para nada malas, pero tampoco son la octava maravilla). Una de las cosas que más disfrutamos trabajar es en el arreglo, la armonía, la estructura, el esqueleto que es donde se inserta la melodía con la letra, que es la parte es la más importante, y después justo abajito del escalón está el arreglo el cual es una de nuestras partes favoritas, dónde nos damos vuelo.

En Bella Época las canciones suenan más amalgamadas, como una banda mas que ser los músicos que acompañan a Juan José, ¿cómo se fueron dando la estafeta al momento de componer?
JM: No es que tengamos unas reglas, se tiene que entender que cada quien tiene su lugar. A la hora de montar las rolas, tratamos de que cada cosa sea importante pero si a todo le das una importancia protagónica vas a tener un desorden. Hay momentos donde hay una canción que pude tener momentos de bajo muy bonitos por lo que “limpiamos” los saxofones para que tenga mas espacio pueda brillar. Es como una danza, se hace de una manera natural pero consciente. En un principio era mucho más atascada nuestra forma de arreglar porque todas estaban hechas a base del piano. Hemos aprendido a economizar a hacer una manera más elegante el uso de los recursos
El Abuelo: Cuando grabamos el EP no teníamos tanto tiempo tocando juntos y no nos conocíamos tan bien musicalmente, ahora para este disco es algo que se logró. Gracias a Defensa pudimos tener varias tocadas y tuvimos tiempo para hacer ensayos y la pre producción para el disco nos dio darle su espacio a cada quien y que cada quien estuviera muy a gusto con todo

Para este disco pudieron hacer pruebas con las canciones de Bella Época en sus conciertos en vivo, ¿tomaron en cuenta la reacción de la gente al momento de grabar?
JM: Sí y no porque ya que estaba grabado. Hay algunas anotaciones que se hacen para sus versiones en vivo posteriores a la grabación, pero la reacción de la gente con las canciones viejas fue uno de los factores que nos hicieron decidir cual de esas canciones iban a estar. Por ejemplo “Si” es una canción que la hemos tocado desde el principio y ha tenido muchos arreglos diferentes. En el estudio le dije a Quique que esas canciones ya eran viejas y él me respondía que sí pero para nosotros o para las cien personas que la han escuchado, hasta los fans de esa canción se merecen una buena grabación por lo que intentamos hacer una buena versión definitiva.

Muchos dicen que el primer disco es un “greatest hits” donde la banda junta todos ese periodo de pubertad para demostrar qué sonido traen
JM: Es un reto el pensar cómo va a sonar lo que sigue porque para este disco tuvimos la comodidad de tener cinco o seis canciones hechas y que en conjunto con las nuevas le dio una diversidad emocional bastante agradable. Hay como un lado A que es mucho más ligero y romántico donde está “Si” y “Roma” y un lado B donde están “Barba azul” y “Otra decepción”, que son viejas. No sé que va a pasar cuando todas las canciones deban ser nuevas, ahora El Abuelo y yo hemos empezado a componer juntos, Andrea me ha dicho que se quiere animar a componer para Torreblanca. Ese tipo de perspectivas en la composición con diferentes combinaciones se me hace muy interesante.

Ese lado romántico que comentas tiene que ver con el título de Bella Época, que es como jugar con un recuerdo que está presente pero lo ves lejano.
JM: Es totalmente una ironía que tiene que ver con la nostalgia usando como primer elemento histórico al que alude la Belle Époque como tal, pero también usándolo como una “Bella Época” en la vida de alguien. Mucha gente puede decir de le hubiera gustado vivir en los sesentas y ser un hippie y esa sería su “Bella Época” que nunca conoció.
También la situación en el mundo es muy difícil, en México en particular es espeluznante pues también hay mucha gente que inevitablemente piensa que antes era mejor, ahora existe más fuerte esa sensación y a eso se refiere también la “Bella Época”.

¿Hubo un momento en que proyectaste algo de más en las canciones y que después al escuchar la canción te haya dado pena sentirte como desnudo al escucharlo?
JM: Tuve un momento de crisis horrible durante la mezcla de “Roma” ya que el ingeniero Luis Román empezó a mezclarla en una dirección completamente opuesta a la que la canción tenía porque la canción es retro y también tiene como esta nostalgia inspirada en música de los sesenta, cincuenta y debe sonar así. La empezó a mezclar llena de efectos y cosas sintéticas y sonaba súper galáctica y todo se desarmó; me afectó muchísimo y ese día yo quería salirme corriendo del estudio y creía que esta canción se saldría del disco. Quique que le gustaba mucho esa canción y por la fe que le tenía me sentó de nuevo para escuchar la mezcla. Si me afectó muchísimo, en realidad suelo controlarme mucho, puedo ser muy mal vibroso si estoy cansado o enojado porque se me nota, esa vez no pude evitarlo y exploté, pero no fue por Quique, fue más porque hacer un disco es muy intenso, estás creando algo que te representa.
El Abuelo: De hecho a todos nos sacó de onda porque para todos era muy claro hacia donde iba “Roma” musicalmente y sí era experimentar con la mezcla que en algunas canciones. Eso estuvo increíble como en “JB”, que es la ultima canción, fue de las que más me sorprendieron.
JM: Quique con nosotros siempre tuvo una actitud muy cortés y respetuosa, sí es exigente y a veces tiene un sentido del humor muy negro o una manera muy aguda de criticar. A mí me confrontó como regla de no producir demás mi voz y que estuviera solo casi todo el tiempo y limpia, eso me costó mucho al principio y ahora es lo que ahora me gusta. Ahora que escucho discos con muchos doblajes digo no esta sobre producido.

¿No creen que a veces había demasiada emoción en algunas canciones de Bella Época?
JM: Estoy de acuerdo en lo que dices pero no me arrepiento, pero no es sobreactuado, simplemente siento que salió toda la carga emotiva y que podría ser excesivo para algunas personas. También hay diferentes estilos y modas donde la gente canta, por ejemplo en el nuevo disco de Metronomy las chicas que cantan ahí tiene la voz menos emotiva del mundo y aún así suena bonito, es como lo que necesita esa música, pero en nuestro caso si es muy explosiva la interpretación en general de toda la banda cuando tocamos en vivo, si nos dejamos guiar mucho por este arrebato. Por ejemplo Gerson hasta hace poco se fijó en las letras, antes le daba lo mismo de qué trataban pero ahora se conectó con la dinámica emotiva y energética.

En este disco las letras son más importantes, incluso desde “Lobo” la letra comenzó a ser tan importante como la música
JM: Para mi la letra es tan importante como la parte musical o instrumental, hay proyectos donde el artista tiene una voz increíble, preciosa, muy correcta y la parte instrumental esta súper lograda pero si la letra me parece torpe, falsa, predecible o sosa probablemente no me voy a conectar al 100%.
El Abuelo: Al escuchar un grupo que te prende musicalmente y que luego le pones atención a la letra que te esta diciendo algo aunque no sea la cosa más profunda del universo, es padre.

Por la variedad de emociones del disco, mucha gente seguramente se sincronizará con las emociones de las canciones que pueden funcionar para escuchar ya sea en la tarde o en la noche
JM: Antes de ser músico he sido fan y he ido a conciertos y me he conectado con canciones que me sirven para desahogarme. Puede ser desde algo clásico como John Mitchell o algo contemporáneo como Antony and the Johnsons, si estoy muy triste y necesito llorar muchas veces me cuesta hacerlo solo pero hay cosas que funcionan como un botón y a mí me gusta. Se me hace como muy rico encontrar eso o también música que te haga reír, o música que te provoque una sensación sexy o yo que se, hay música que te ayuda mucho a ponerte en ciertos moods y la música que nosotros hacemos me ha servido para desahogarme o para reflexionar sobre muchas cosas; a mí en lo personal me ha significado un viaje muy profundo en la construcción de las letras y me doy cuenta que hay gente que en su forma de interpretación también está encontrando y sintiendo algo muy profundo en nuestra música. Eso es bien bonito, desde hace tiempo la gente ha usado canciones para proponerle matrimonio a alguien o que cuando murió su mama solo ponían escuchar “Nada me saca de la cama”, esas cosas son invaluables porque compartir con alguien un momento importante de su vida crea una red de empatía de una relación invisible de alguien que no conoces y que no se puede volver tu amigo, pero estas compartiendo algo muy intenso.
Me siento afortunado por el público que le gusta Torreblanca, ya que les gusta escuchar la música, no es un público tan popero pero de ese pop decadente que igual sólo van a gritar y ya, nuestro público aprecia nuestros arreglos y si hacemos un cambio se dan cuenta y hay una reacción y luego cantan las canciones con nosotros de una forma muy atenta. Es muy especial para todos el tocar en vivo es nuestro momento favorito de todo el proceso.

¿Qué es lo que aprendieron en esta última etapa del Bella Época?
JM: A mí me cayó el veinte de que tenemos mucha suerte que cada uno de los cinco aporta algo muy valioso a la combinación final de Torreblanca.
El Abuelo: Yo me di cuenta -y me hizo sentir muy bien- del poder componer algo, para mí era algo que me había costado pero hacer. Ahora escucho “JB” y me siento mucho orgulloso y feliz al darme cuenta de que pueden salir ese tipo de cosas de mi.
JM: Si lo resumiéramos todo de Defensa a Bella Época aprendimos a trabajar en equipo. Esa es la gran ganancia que tenemos hasta ahora y se tiene que seguir nutriendo y reflexionando porque la comunicación no es una medalla que te cuelgas y ya, hay que invertir mucho tiempo en que todo esté claro, bien dicho y todo pueda fluir, porque sería horrible para todos que nos fuera bien o que estuviéramos tocando bien y que no nos cayéramos bien. La parte creativa es muy disfrutable para todos nosotros y el trabajo en equipo ha sido difícil y puede que se de mas cómodo en tiempo de crisis que tomar el papel de tirano y decir esa la compuse yo; hay que tener la madurez de decir: “Explícame por qué no te gusto esto” y negociemos. Si logramos que esta alquimia, por decirlo de alguna forma, dure tendemos algo valioso entre manos de lo que yo pude haber hecho solo. Me siento muy afortunado de estar en el ojo de ese tornado.

Video: Sesión Me Hace Ruido Torreblanca /// Otra decepción