Perfil /// Trementina

“Trabajamos con lo imperfecto, con lo que no es atractivo de la música”

Por Carolina Vaccia, corresponsal en Chile
Fotos Mario Chavarría Rocha

Desde Santiago de Chile, Trementina nos cuenta acerca de su vertiginosa carrera musical, marcada por la fortuna de haber llegado a oídos del prestigioso sello japonés Vinyl Junkie, y su reciente viaje a Japón donde editaron su primer disco, en el que destaca un perfecto equilibrio entre el ruido y las melodías bonitas.

Todo partió hace menos de dos años en un skate park en la lluviosa ciudad de Valdivia en el sur de Chile, en el que Cristóbal –líder y principal creador musical de la banda- y Lucas se conocieron.

Las tablas y los gustos musicales los unieron, y así fue como de las piruetas se pasaron a las guitarras y comenzaron a acumular tardes eternas de improvisación y ensayo. A éstas se sumaron Vanesa – a quién convencieron en un principio para hacer segundas voces y hoy es la voz principal- y Simón, elegido casi por concurso público al no contar con batero.

Si bien el nombre Trementina nace en honor a Vanesa -quien estudiaba arte y llegaba a los ensayos con su ropa infestada a este químico que sirve para diluir óleo-, con el paso del tiempo se dieron cuenta que no era mera casualidad y que, en realidad, el efecto de la trementina tenía mucho que ver con la música que les gusta y en la que creen: música que se transforma y se diluye.

Son fieles representantes del Shoegaze -“aman” a My Bloody Valentine– género con lo que se identifican profundamente, sumando elementos Nosie Pop. Su música es una explosión de energía inconstante que los hace pasar del caos a la tranquilidad, una y varias veces, en una misma pieza: “Nos gustan las guitarras fuertes, con oscilaciones, los cambios de ritmo, pasando del ruido a la calma, pero logrando un equilibrio perfecto”.

Lo interesante, es que su versión de perfección está lejos de las estructuras y de “lo musicalmente correcto”. Es más, con orgullo indican que les gusta trabajar con la imperfección, haciendo del error un aliado en la composición.

La esencia del sonido para nosotros es el ruido, lo que en la pintura sería la mancha. El ruido puede ser hermoso, pero hay que saber manejarlo y transformarlo para que no sea redundante. Nosotros trabajamos con lo esencial, con lo imperfecto, con lo que no es atractivo de la música

Las letras son en inglés y están a cargo de Vanesa que, como buena veinteañera cargada aún de una linda e intensa energía adolescente, recurre a su estado de ánimo para componer: “Nosotros somos súper jóvenes, nos pasan cosas todos los días, estamos todo el tiempo cambiando; hay días en que amanezco eufórica y feliz y hay otros en que estoy deprimida y quiero que las canciones sean así”.

Saben que muchos los van a criticar por no cantar en español, pero tienen una fuerte y sencilla razón para seguir en la misma idea: “El cantar en inglés no limita el público, al revés, no sólo nos pueden escuchar en Chile, sino que podemos ser más universales y llegar a mucha más gente; internacionalizarnos”.

En eso soñaban mientras grababan sus canciones en la habitación de Cristóbal y las subían a Soundcloud, cuando, a través del fan page de Facebook, entró un mensaje que les cambió el destino: “Nos escribió un japonés diciendo que nos había escuchado y que le había gustado la banda y que quería editarnos allá con su sello. Obvio dijimos ¡esto es una broma!”.

Pero cuando entraron al perfil del remitente se dieron cuenta que era nada menos que el dueño del sello japonés Vinyl Junkie, el cual alberga a connotadas bandas del circuito Shoegaze, tales como Ringo Deadthstarr (EUA), Medicine (EUA), Swerverdriver (Reino Unido), Pía Fraus (Estonia), entre otras. Ahí fue que explotaron de felicidad: “No lo podíamos creer ¡Gritábamos como mina!”.

Después de ese primer mensaje, llegó la invitación para grabar su primer disco en Japón, el cual lleva por título Brilliant Noise. Fue en este proceso que lograron consagrar su sonido a través de un trabajo, por primera vez, profesionalizado.

Además, estuvieron diez días de gira por Japón donde fueron tan bien recibidos por el público, que ya los invitaron para el próximo año: “Fue increíble ver cómo la gente que ni nos conocía vibraba con nuestras canciones; lo pasamos muy bien”. Cuentan también que, aparte de las tocatas, lo que más disfrutaron fue haber conectado amistosamente con otras bandas –a las que admiran- y que éstas se interesaran en su trabajo: “En Chile las bandas ni te miran, en cambio allá se interesaban, gente que nosotros decíamos ¡Wow con quién estoy hablando! Intercambiábamos discos; eso nos encantó”.

Sobre de sus planes, por lo pronto están siendo editados por un sello local llamado BYM Records –el que reeditará el disco grabado en Japón- y trabajando en su segundo disco, el que esperan grabar a fines de 2015. Este segundo trabajo representa el gran desafío de sellar su identidad como banda:

El primer disco, fue muy inesperado. En realidad es una recopilación de todo lo que habíamos hecho. Pero el segundo va a ser de verdad nuestro primer disco, con un concepto mucho más trabajado, con un sonido más firme; la idea es madurar las composiciones. Este segundo disco va a ser como nuestra estampa, lo que suena a nosotros.

 Si bien el foco es la calidad musical y la consistencia, señalan que el máximo desafío, más que hacer un noise brillante, es seguir sintiendo esa energía juvenil que los caracteriza y los mueve: “La mejor forma de saber si tu música es buena, es cuando tú vibras y transmites eso al que te escucha”. Y así mostrar al mundo que su paso de Valdivia – casi en el fin del mundo – a Japón, fue mucho más que un accidente afortunado.

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