Reseña: Liam Gallagher /// As You Were

October 12, 2017

Liam Gallagher
As You Were
Warner Bros.
7.0

Por José Marr‏ @JR_Marr
Crazy Rhythms Music

Aquí viene de nuevo Liam Gallagher, quien después de crearse una reputación poco agradable o admirable a pesar de su a veces fanfarrona soberbia, sigue siendo una personalidad muy vigente en el mundo de la música, del Rock internacional. A la disolución de Oasis, Liam ya lo había intentado con todos sus compañeros, pasando a ser Beady Eye sólo con la excepción de su hermano Noel quien por su parte, creo a sus High Flying Birds y que a decir verdad, le ha ido mucho mejor con el par de lanzamientos que ya tiene en su haber (y un tercero en camino para noviembre). Sin embargo, como a Beady Eye no le salieron bien las cosas con su Be en 2013, Liam se vio casi obligado por concluir el proyecto, de hecho, aunado a una pobre calidad musical diría que ocupar ese nombre no le ayudó demasiado, y eso se compara simplemente con la exposición que han tenido los sencillos previos a As You Were por llevar, ahora, la firma del exvocalista de Oasis. Y es así como llega Liam a este 2017, afirmando, que su debut solista será el disco que salvaría al Rock y aunque esté muy lejos de cumplirlo, desde la primera impresión As You Were es un trabajo que se erige por encima de sus dos antecedentes con Beadye Eye y un par de discos de Oasis.

La razón es sencilla, Liam capitaliza bien sus “limitadas” cualidades y de cierto modo, la misma marca de Pop-Rock clásico inglés que hacía Beady Eye, la traslada aquí pero con una producción que le da un aspecto rejuvenecido y hasta moderno. Lógico es que Liam haya conseguido un tridente de productores del más alto nivel quienes también le han ayudado como coescritores (¿Es un auténtico álbum solista de Liam Gallagher?) de los temas, nombres como el de Greg Kurstin, Andrew Wyatt y Dan Grech-Marguerat no son poca cosa ni en singular, ni mucho menos juntos. Así que lo que consiguen es una mezcla de sonido que en general se escucha muy orgánico, rústico esencialmente (“Chinatown” podría ser el mejor ejemplo pero como canción es un experimento mal logrado) por la gran presencia de guitarra acústica, algunas maracas acompañando el compás de batería y escobillas a veces acariciando la percusión, pero también con dosis de potencia; el trío de productores consigue una mezcla donde también convive la estridencia de las guitarras eléctricas, colocando la voz de Liam, su actitud, encima de todo, y lo más importante, lustra y delinea bien la garganta y tono del interprete quien sabemos, ha sufrido por ese tema en los últimos años.

En materia de la música, As You Were puede cumplir y defraudar las expectativas. Las cumple por hacerlo bien, pero también es exactamente lo que se puede esperar de Liam Gallagher. Quizá la sorpresa aparece en el aspecto lírico, que ante la imposibilidad de darnos algo realmente interesante donde sólo se exhiba la arrogancia del autor cantada con su autoestima a tope, tenemos una nueva visión donde se percibe un orgullo doblegado y de una autocrítica nunca antes vista en él. Ahí está “Wall Of Glass” que hace una metáfora de su vanidad rota como un muro de cristal, mientras que en “For What It’s Worth” se dice arrepentido por acciones del pasado o al final con “I’ve All I Need” agradece por el apoyo (aunque usted no lo crea).

Afortunadamente a lo largo de As You Were hay buenos pasajes, que ya por sobre todas las cosas, es para aplaudirse viniendo de Liam Gallagher, que si entramos en esa comparación que Oasis siempre tuvo con The Beatles, diríamos que tenía el papel de John Lennon pero como compositor era Ringo Starr. Así que tener a “Greedy Soul” es un triunfo que se redefine como una versión mejorada de “Wall Of Glass“; de batería constante, impulsora, quintas de guitarra acústica incisivas y por ahí se mezcla de repente la armónica creando un sonido férreo. Momento donde Liam logra el cometido de sonar vigoroso y como una imponente estrella de Rock n Roll. Contrasta, pero no por error, con “Paper Crown“, de pasajes acústicos que no logró definir tan bien con Beady Eye, e incluso Oasis, aquí tenemos uno más que aceptable.

De repente Liam tiene el poder de hacer buenas baladas, una clara es “For What It’s Worth” que viene a ser su propia “The Beat Goes On” ya que va en el modelo clásico de lo que pudo ser un éxito en la década de los 70s (pienso en Gilbert O’Sullivan) y quizá se pudo haber explotado esa vertiente de los arreglos orquestales de su versión en vivo en los estudios Air. Sin embargo, “When I’m In Need” es un recordatorio de las limitaciones vocales de Liam y cómo tiende a imitar a The Beatles hasta de manera involuntaria, podría decirse que al menos logra un subidón grandilocuente al final, pero más adelante en “Come Back To Me” intenta surcar esa cresta cantando y simplemente no lo logra, aquí se ve forzado en, para dar variedad, cambiar el enfoque de la producción, ocupando otros pedales de guitarra y el resultado es de lo menos grato.

Esos cortes rocosos y arrolladores es cuestión de saber como abordarlos, porque hay muestras bien ejecutadas como “You Better Run” y “I Get By“, esta última con una masa instrumental furtiva y ponderante a la vez. Datos interesantes, nos da guiños líricos a bandas inglesas del pasado como los ya mencionados Beatles y hasta The Rolling Stones. Previos en curva alta para bajar las revoluciones en “Universal Gleam“, uno de los mejores y más sutiles momentos, aquí llevado por un desenvolvimiento lento, prolongado, marcado por una progresión acústica bella y convencional, algo así como lo que intentó en su momento con “The Morning Son“. Funciona su atmósfera ensoñadora, lo logra entre sonajas, bombos, violines difusos, coros eclesiásticos diluidos… el puente ideal para un finiquito como “I’ve All I Need“, una canción de agradecimiento, con más referencias al cuarteto de Liverpool y con un coro reconfortante que sabe a un hasta pronto.

Respondiendo a la pregunta sobre si estamos escuchando a un Liam auténtico, la respuesta es sí. Tomando en cuenta que ante -como el lo ha dicho- la inconformidad del resultado de Be con su anterior banda, fue el motivo que lo llevó a intentarlo una vez más, esta vez solo. Incluso dijo que pensó en retirarse de la música. Otra pista es que “Universal Gleam” iba a ser el nombre del último disco de Beady Eye pero termino siendo una canción para este debut, que también, ni siquiera se iba a llamar As You Were pero resultó de un entendido de palabras en el estudio, ambos hechos delatan el control casi caprichoso de Liam sobre su material pese a las colaboraciones y ayudas. A final de cuentas es la actitud arrogante doblegada, sobria por fin y en cierto grado madura de Liam la que sale avante, la que impera. ¿Era necesario un disco de Liam Gallagher en pleno 2017? Quizá no, pero al menos llegó en el momento indicado e hizo lo necesario.

Post escrito por: Jose Marr

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