Foto Sadi @sadisky
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19 años del Memo Rex Commander
y el Corazón Atómico de la Vía Láctea
Por Sadi @sadisky
La primera de cinco presentaciones de Zoé en el Estadio Seguros GNP fue memorable, cargado de nostalgia y con un guiño especial a su icónico disco Memo Rex Commander y el Corazón Atómico de la Vía Láctea. Casi 20 años han pasado desde el lanzamiento de ese álbum. Diecinueve, para ser exactos y la sensación de viaje en el tiempo fue inevitable. Un año más y la banda podría celebrar en grande las dos décadas de una obra que marcó a toda una generación.
A pesar de las críticas que León Larregui suele recibir, es innegable que su música se convirtió en un referente del Rock mexicano. Con un sonido propio y una identidad bien definida, Zoé se ha consolidado como una agrupación clave de la escena nacional. La noche comenzó con una tormenta implacable que azotó dos veces la ciudad, provocando caos e inundaciones. En ese ambiente eléctrico, Hello Seahorse! abrió el espectáculo como telonero de honor. Desde semanas antes, la banda había anunciado que cada una de las cinco fechas contaría con un invitado diferente, y la elección de Hello Seahorse! resultó perfecta para encender motores. Su set, breve pero potente, incluyó temas como “Bestia” y “No Es Que No Te Quiera” por mencionar algunos, interpretados mientras la tormenta alcanzaba su punto máximo. El público respondió con una ovación que anticipaba lo que estaba por venir.
Cuando las luces se apagaron y los primeros acordes de “Memo Rex”, “Vinyl” y “Vía Láctea” llenaron el estadio y la energía se desbordó. Zoé demostró porque logró agotar cinco fechas: aunque a algunos les puede incomodar la figura de León, es difícil encontrar a alguien que no haya cantado al menos una de sus canciones, ya sea con orgullo o como “gusto culposo”. El escenario, con una enorme pantalla corrediza del tamaño completo del entarimado, fue otro de los grandes aciertos. Los visuales que repasaban la trayectoria de la banda y acompañaban temas como “Paz”, la nueva “Rexsexsex” y “Veneno” ofrecieron una experiencia inmersiva y espectacular.
El setlist, de 27 canciones, combinó éxitos infaltables como “Fin de Semana”, “Karmadame”, “Arrullo de Estrellas”, “Miel” y “Labios Rotos”, junto a joyas del Rocanlover y, por supuesto, del mencionado Memo Rex… Cada interpretación se sintió como un viaje al pasado, un reencuentro con momentos que muchos de los presentes atesoran. Y para coronar la velada, Denise Gutiérrez de Hello Seahorse! regresó al escenario para acompañar a León en “Luna”, además de sumarse en “Soñé” y “Dead”, dejando un cierre vibrante e inolvidable.
Zoé demostró una vez más que, más allá de opiniones personales, su música sigue uniendo generaciones. Fue una noche que no solo celebró su historia, sino también la de todos aquellos que han crecido con su sonido.
