Cortesía José Jorge Carreón (OCESA)
Cortesía José Jorge Carreón (OCESA)
La frescura de Balu Brigada en la CDMX
Por Aarón Cortés @acorsaint
Pocas veces tenemos la suerte de que traigan a nuestro país a esas bandas Indie “emergentes” que aspiran a la grandeza, justo antes de que el hype explote. Especialmente fuera de un festival o acto telones escondidos a la sombra del acto principal.
Pero con Balu Brigada ocurrió dos veces el mismo año.
La primera vez que vinieron a México fue en febrero gracias al tour de Twenty One Pilots, presentándose de lleno en un Estadio GNP que los recibió con los brazos abiertos, y una fanbase ajena decidida a acogerlos y acompañarlos en su camino a la cima.
Gracias a esto, ahora con el estreno de su álbum debut Portal, eligieron a la CDMX como la primera parada de su propio tour por Norteamérica. Ahora con una fanbase más consolidada gracias a canciones como “Backseat” que salieron hace unos meses y rápidamente llamaron la atención de la comunidad alternativa, el hype en redes sociales y los antecedentes del show ya mencionado.
Cortesía José Jorge Carreón (OCESA)
Cortesía José Jorge Carreón (OCESA)
A pesar de que su debut salió apenas hace poco más de un mes, la experiencia de Balu Brigada comienza hace 10 años, cuando comenzaron a lanzar algunos sencillos mientras descubrían su propio sonido. Misma que se nota desde el primer instante que pisan el escenario, con la confianza que pocas bandas poseen en el primer show promocional de su primer álbum.
Con atuendos sencillos pero llamativos, cabello alborotado, lentes oscuros, acompañados de una gran sonrisa y aura despreocupadas, Henry y Pierre Beasley parecen músicos extraídos de la época dorada del Indie Rock, listos para brillar junto a una nueva generación.
El venue para este encuentro fue el Foro Puebla, una elección cuestionable de booking considerando los desperfectos de audio que atenuaron el impacto de sus primeras tres canciones, bartenders irrespetuosos promocionándose a gritos y carcajadas entre cada silencio y balada del concierto, y una ecualización cuestionable que cambiaba en cada momento.
Afortunadamente esto no fue problema para que la banda se apropiara del público que ansiaba disfrutar de canciones como “Designer”, “Politix”, “Moon Man” y “So Cold”. El setlist estuvo compuesto en su mayoría por canciones de Portal, tocando casi todo el álbum (incluyendo intro e interludio), excepto por “Isolation”. Además le dieron espacio a las canciones del EP Find A Way como con “Designer”, “2good”, “OH! Not Again” y la canción homónima, que además fue mezclada con “Could You Not” como un pequeño guiño a los inicios de su carrera para cerrar el show. Sin dejar de lado un cover sorpresa a “Oblivion” de Grimes como la cereza del pastel.
Cortesía José Jorge Carreón (OCESA)
Cortesía José Jorge Carreón (OCESA)
Una gran combinación de temas pasando entre guitarrazos, beats de Indie Pop, sintetizadores y algunos instrumentales introspectivos que demuestran la versatilidad sonora que han acumulado durante el tiempo que se preparaban para salir al mundo.
La producción fue sencilla basándose únicamente en humo, luces, instrumentos y una plataforma elevada para la batería (que sonaba muy fuerte debido al pequeño tamaño del recinto), dándoles el ambiente indie primerizo necesario para sentirnos parte del nacimiento de un próximo headliner, con esa crudeza y energía en los primeros shows. No fue necesario un gran concepto o escenografía para capturar a la perfección la esencia de la banda, aunque nos hubiera gustado verlos con todo su potencial sonoro en un lugar más preparado para este tipo de conciertos.
Hubo mucho espacio para los agradecimientos, firmas de autógrafos espontáneas, intercambio de plumillas y regalos entre la banda y los asistentes, un pequeño discurso en español cortesía de Henry (que se ve que ensayó muy bien) y muchísima energía y actitud en todo momento. Y a pesar de que solo se quedaron un día en la ciudad antes de su show en Guadalajara, fue más que suficiente para consentir al máximo a los fans, llegando a saludar a todos aquellos que los esperaban antes y después del show.
Claramente Balu Brigada, al igual que cientos de bandas extranjeras, se enamoró de México y los fans de ellos. Por lo que no tenemos duda que volverán tan pronto como les sea posible y probablemente los tendremos en algunos festivales en el futuro (como Corona Capital, Pal Norte, o derivados). Esperamos que sea en mejores condiciones y con un mejor trabajo de booking para poder saltar y bailar como se debe.
Mientras tanto nos quedamos con un gran sabor de boca por su capacidad de saber cómo llevar un show a reventar, y porque tanto cariño y tanto carisma nos demuestran lo lejos que podría llegar esta banda en un futuro.
