Entrevista /// Heymoonshaker

Por moonman /// Fotos Rodrigo Jardón rodrigojardon.com

Mientras nos dábamos una vuelta por la zona cultural en la Cumbre Tajín, nos encontramos con un pequeño escenario en donde dos tipos hicieron lo imposible: unir el Blues con Beatboxing. La combinación suena dispareja y poco coherente, pero bastó unos segundos para enamorarnos del poder gutural y físico que Dave Crowe ha ido forjando con el tiempo junto a la rasposa voz de Andy BaLcon, que de inmediato nos remitió a Tom Waits.

Ellos son Heymoonshaker y ofrecieron un concierto tan auténtico y original que me revivió esa emoción por descubrir nuevas bandas. Hacía mucho tiempo que una banda no lograba hipnotizarme por la energía que desprendían por la unión de dos universos musicales.

Tras conocerse en Nueva Zelanda y reencontrarse en Suecia, el dueto inglés está comenzando a tener un fan base bastante sólido en algunos países de Europa recogiendo excelentes críticas con sus constantes conciertos. En marzo pasado lanzaron su primer EP (que mas bien parece un LP) llamado Shakerism, en donde recopilan en nueve canciones esta combinación musical que parece haber sido creada con métodos de gastronomía molecular.

Platicamos con ambos mientras se quitaban el sudor de su segunda y última presentación dentro de la Cumbre Tajín.

¿Cómo empezó el proyecto?
Dave: En un mini golf de Nueva Zelanda. Andy estaba con su chica y yo con la mía y cuando escuché su acento inglés lo invité a mi camioneta por una cerveza. Camioneta-cerveza-guitarra-beat… ¡pum! Estuvimos tres meses y nos despedimos. Cuatro años después nos encontramos nuevamente en Suecia y comenzó todo.

¿Cuándo te diste cuenta de que tenías el don del beatboxing?
Dave: No fue darme cuenta, fue trabajar muy duro. Cuando vi a una persona haciendo Beatboxing vi el poder que tenía al actuar, cantar y bailar. En ese momento estaba estudiando para danza clásica y ballet y me intrigó mucho el poder de manipulación con la gente, el poder de los movimientos, ojos y palabras que provocaba. Cuando lo vi me perdí de mí mismo, no sabía mi nombre ni sabía que era un ser humano, ¡si me hubieran dicho que matara al de al lado lo hubiera hecho! (se ríe). Un día después quería tener ese poder aprendiéndolo… tres años después se convirtió en mi pasión y renuncié a todo. Sé que es posible obtener lo que quieres, las inseguridades es lo que te detienen.

¿Cómo procesas la energía que viene de la gente y la proyectas con los beats?
Dave: No hay forma de hacerlo, no hay opción. Cuando ves a ESA mujer y sientes ese sentimiento de amor que detiene el tiempo, es lo mismo que siento en el escenario. Trato de no emocionarme mucho porque a veces me excito demasiado y lo saco y acabo muy cansado. Necesitamos crear el fuego y aventarlo y ver qupe obtenemos de vuelta. Es un trabajo 50-50 pero si no lo empiezas no estás haciendo tu trabajo.

¿Shakerism es su primer álbum o un EP?
Andy: Tenemos 18 canciones grabadas y tomamos algunas que editamos en un álbum acústico. Nuestro agente nos dijo que sólo cinco, pero nosotros estábamos tercos de que queríamos más y quedaron en nueve. En septiembre lanzaremos el nuevo álbum.

¿Cómo complementaron la parte blues y beat box?
Dave: La gente normalmente guarda los géneros en cajas, nosotros destruímos la caja. Cuando describimos nuestra música la gente se queda con cara de ??, por lo que siempre les decimos que mejor vean nuestros videos de YouTube.

Andy: A mí siempre me ha gustado el rock porque mi padre tocaba; el padre de un amigo es un granjero y tocaba la guitarra, era una réplica de Tom Waits. Iba mucho a su lugar, el cual era como un campamento hippie. De ahí surgió mi gusto por el Blues y comencé a hacer investigación por mi cuenta.

¿Cómo ha ido creciendo el grupo?
Dave: Sabía que pegaríamos en Francia, hemos invadido nuevos territorios como Alemania, Estados Unidos y Canadá. Va a tomar mucho tiempo que nuestra música llegue a donde queremos. En México ha sido fácil, dimos tres conciertos y con tan sólo verlos a los ojos sabríamos que entendían y sentían nuestra música.

Algo que dijiste en el escenario que me llamó la atención, que pensabas que eras un hombre libre hasta que viniste a México, ¿qué pasó para que te dieras cuenta de eso?
Dave: Te das cuenta de lo que eras cuando vives algo nuevo, volteas para atrás a ver al chico que eras y piensas “Él pensaba que sabía mucho“, pero no es cierto. Mi vida me gusta, pero eso no me frena a buscar cosas nuevas y trabajar. En México me di cuenta de que estaba mal, conocimos gente que no tiene nada pero a la vez tiene todo. Si ves el brillo en mis ojos es por la revelación que he tenido.

Andy: Todos han sido muy bellos y cálidos. Me encantaría regresar pronto. Afortunadamente mucha gente se ha acercado a pedirnos nuestros datos, así que ojalá un agente nos traiga de vuelta.

En sus conciertos es muy fácil comenzar a hacer paisajes mentales, ¿alguien se ha acercado a ustedes para hacer un soundtrack?
Andy: Aún no hemos tenido la oportunidad de conocer a alguien, ojalá que pronto suceda. Cuando estábamos escribiendo el disco a inicios del año, cada canción estaba basado en algo algo muy visual, nos imaginábamos escenas de película, sobretodo de Tarantino.

Dave: Pensamos mucho en cómo nos queríamos mover con la canción a través del ritmo y el beat en vez de escribirla y ver qué pasa. Cuando estamos en el escenario me puedo visualizar caminando en el desierto con un caballo. Me gusta porque cuando nosotros lo logramos, e scuando la gente puede fluir. Es lo que te decía de tener la confianza de poder llevar a la gente a las estrellas.

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