Crónica de un Flow Fest 2025

Ambiente

🔪 Crónica de un Flow Fest 2025
x Chakanice

DÍA 1

“Levantándome temprano para llegar a tiempo, dos horas de trayecto” nunca tuvo más sentido para un chorro de gente que, como yo, desde el Edomex y muchas otras partes de la CDMX, nos movilizamos para caerle a la delegación Iztacalco, en medio del tráfico de siempre en esta metrópolis ultracaótica y con un calor que sofocaba tanto en metro como en automóvil.

La cita para la acreditación, como cada año, fue en la Puerta 15 sobre Añil, que a diferencia de otras ediciones, estuvo menos atascada, lo cual ya fue empezar con el pie derecho: nadie quiere llegar a formarse hora y media para pasar los filtros. En fin, una vez adentro dejé mis cosas en la carpa, agarré un agüita y me di un rol directo al escenario Bacardí.

DJ Drewther ya había empezado con su Cumbiatón bien ricolino; hasta donde tengo entendido, hasta le cayó Sonido Flamin Hot. Pero al saber que estos también estarían al día siguiente, corrí al Dembow Vickys porque tenía que ver sí o sí a Sayuri y Sopholov.

Las muñecas del Estado pusieron la vara muy alta desde bien temprano. La bandita no dejó de cantar y corear absolutamente todas sus canciones, desde “2 pa 1” hasta la versión Punk Rock de “Secunena”, que nos recordó un poco a Las Ultras. No cabe duda de que acertamos en esta gran recomendación, ya que el dúo fue uno de los mejores shows del evento, y no sería la última vez que veríamos a estas muñequitas en los escenarios del Flow Fest 2025.

Con el calor que hacía el día sábado, no pude evitar que se me antojara una chelita fría o un drink refrescante y con hielitos. ¡Pero la neta, sí bajonean los precios! Sé que mucha banda trae pa’ gastar a lo bestia ¡Pero no todos! Lxs que vamos a chambear no me dejarán mentir: unx no quiere gastar 500 varos en 2 chupes. Pero bueno, me formé y pagué mis $240 por un cantarito doble. Nada nuevo en los festivales y conciertos, ¡pero sigue doliendo, jajaja!

Ahora sí, con mi chupe bien helado, le caí a DJ Chikle y Fuentes Prod en el stage Bacacho sin saber que sería la primera de muchas veces que vería a Yeyo, Nasty Vato, Novato El Flow, Donny Graff con toda La Obsesión Factory en el festival. Creo que canté “Mónica” más de tres veces, ¡y no es queja! También Sayuri y Sopholov aprovecharon para presumirnos su Disco de Oro, que recibieron en el backstage del evento. Aunque Lunay ya sonaba en el escenario principal, de una vez les confieso que fue un stage al que me acerqué muy poco.

Como si no me hubiera bastado, a eso de las 8:20 de la noche, me moví al escenario Dembow Vickys para seguir con el coto de La Obsesión Factory. Solo que, al ser una tarima mucho más amplia, Donny Graff convocó a una cantidad de gente que no esperaba ver; o sea, no es que no tuviera altas expectativas del Sereno Moreno, pero definitivamente fueron superadas. Me quedó claro que, como equipo, La Obsesión está más pegadísima que nunca.

Aquí topé que los puercos, aka la policía, estaban súper pesados, ¡qué raro! Parecían lobos cazando cualquier y hasta la más mínima señal de humo, lo que no evitó que la bandita aplicara 2, 3 trucos y el olor característico a maconha se hizo presente. El festival, para bien y para mal, tiene reglas y también me tocó ver que torcieran a varios carnalitos hasta por cigarros, y chale, pero ni pedo. La cosa es estar al tiro, no confiarse demasiado, es lo básico hasta para cuidar tus pertenencias. Pero pareciera que hay que cuidarse de los elementos de seguridad por igual, ya que muchas veces son violentos e intimidantes, y nadie quiere tener un desencuentro con ellos en la mitad de la presentación de tu artista favoritx, porque la verdad es esta: no se sabe si van a proceder conforme a la ley.

Posteriormente y casi a las 11 de la noche, Tayhana en el stage Bacardí me dejó con la boca abierta. Como toda la bandita estaba embelesada con Wisin y Nicky Jam, solo unxs pocxs experimentamos y gozamos de una de las mejores mezclas de la noche. Tayhana habló poco, pero no era necesario; las palabras sobraban si nuestros cuerpos vibraban en la misma frecuencia de un beat electrodegenerado.

DÍA 2

Segundo día, ni me revisaron en la entrada, corriendo para llegar con Sonido Flamin Hot. Al arribar me doy cuenta de que, aunque no hay tanta gente, se va uniendo gradualmente hasta volverse un auténtico sonidero y aún mejor porque tuvimos acordeón en vivo, ¡papá!, y SFH trajo de nuevo a DJ Drewther, lo que terminó de complementar un show que de por sí, estaba on fire. Espero que no sea la última vez que les inviten porque se nota que al Flow Fest 2025 le encantó la Cumbia picante de este crew cumbianchero.

EsaMiPau, de la mano de Rubix la Vox, subió a Ivy Wavy, La Nómada y Charly Gynn con Alonzo G, un team full mexa con los ánimos siempre al cien y que se mantiene fuerte en la escena del incipiente, pero duro, Reggaetón mexa.

Me divertí muchísimo en Cachirula y Loojan, pero no sé si fue la zona, el sol o mi percepción, que la bandita no cantó casi ninguna canción y de bailar y perrear, ni hablamos. Yeri Mua le cayó para encender “de poco a poquito” cantando “Loquito”, la rola que comparte con el dúo, pero ni eso fue suficiente. Estoy segura de que la audiencia cercana al escenario traía otro desmadre; hasta le pasaron a Julieta una playera que más adelante (o más atrás) “bautizó”, y si no sabes a qué me refiero, te reto a que lo busques 😉

Kidd Keo se retrasó como 10 minutos, pero eso solo aumentó las ganas y ansias que sus fans mexicanxs tenían de verle. Pude notar que su audiencia era súper true y comenzó a oler a una warimana de buena calidad. No es que yo me pueda autonombrar una experta en contenido cannábico, pero sí lo suficiente para realizar el comentario (guiño, guiño).

Ezya, el papá de los chavos, aunque fue “más de lo mismo”, no aburrió ni tantito, porque “más de lo mismo” es lo que la banda mama de La Obsesión. Ahora trepó al Ruzzo Doblez y La Obsesión no tardó en unírseles para cantar varios de los tracks que ya habían sonado bien recio, pero que la banda nunca se cansó de cantar.

Le siguió Mar, en el mismo escenario, con un show medio oscuro onda SadoTech, pero con sus particularidades, lo que lo volvió, al menos para mí, una presentación difícil de encasillar. También estuvo mezclando un rato, lo que le dio un toque súper fresh al concepto que nos mostró. No le ayudó el horario, pero lxs que estuvimos sabemos que Mar dio un espectáculo de alto nivel que te deja la piel chinita, con ganas de ver y oír mucho más.

Una de las mínimas veces que me dirigí al escenario Coca Cola, tenía que ser para atestiguar la presencia de Natanael Cano. Y estuvo chido, pero desde el fondo de mi corazón no puedo evitar pensar que sus presentaciones podrían estar sobrevaloradas: balbucea en la mitad de sus canciones y, si no fuera por los excelentes músicos que lo acompañan, no sería tan espectacular verle moverse como muñeco de trapo de un lado a otro en el escenario. Más que artista, me parece que se ha consagrado como un símbolo de algo más, de la irreverencia, del valemadrismo, de la anticensura, no sé. También podría ser que ya no soporto ver presentaciones de talentos masculinos sin más talento que prenderse un porro arriba del escenario cuando a las morras y disidencias de la misma industria se les ningunea, se les hace menos, se les paga poco o nada y se les exige el doble: canto, baile, vestuario, coreografía, rostro, cuerpo, maquillaje. Y lo más loco de todo es que muchas/xs lo hacen, pero se tienen que seguir enfrentando a los estándares misóginos y cuadrados que siguen manejando. Es verdad que esto está cambiando para algunas/xs, por ello nos corresponde como audiencias repensar qué y cómo consumimos y ver si existe la posibilidad de que estos consumos, al ser más conscientes, nos redirijan a una industria más equitativa y justa para todxs. Apoyemos a los artistas emergentes y veamos los festivales corporativos como plataformas que apoyan el despegue de lxs mismxs.

Y no olvidemos a Miguel y Berenice: un día salieron a trabajar, a divertirse y no volvieron a casa, y aún no hay castigo para los responsables.

En resumen:

Lo bueno:
La cantidad de puertas y oportunidades que representa un escenario del tamaño del FF, la importancia de las plataformas.

Lo malo:
Los puercos, los precios, los baños.

Lo cagado:
La banda tan pose que olvida que está interactuando con otras personas.