MHR /// Discos
Modern Life Is Rubbish reveló, hace 25 años, a Albarn como un bardo con un ojo y un oído perfectos para retratar lo que era ser joven y ansioso en la Inglaterra post Margaret Thatcher.
At Folsom terminó de demostrar que para Johnny Cash no había barreras, ni sociales, ni musicales, ni raciales, ni de clase; es un documento esencial para entender la psique y el ethos norteamericano de finales de los sesenta.
Monstruos del Mañana es una banda con mucho potencial que vale la pena seguirle los pasos y además nos llena de curiosidad presenciar su desempeño en vivo con su álbum Tenquén.
Ya llegó, ¡ya está aquí Ciudades Flotantes de Los Mundos!, ¿qué podemos decir al respecto? Pues que más o menos, un poco de pan con lo mismo para ser honestos.
¿Tranquilty Base será un pequeño paso camino a la evolución o será el momento de aferrarnos al pasado de Arctic Monkeys?
Version 2.0 se aleja del debut del súper grupo de dos años antes en lo musical y eso es lo que resultó sorpresivo y refrescante en su momento.
Quizá Good Thing de Leon Bridges no sea el disco del año, pero es un esfuerzo refrescante y se agradece la honestidad con la que Leon se empeña en mantener vivo a un género al que se tendría que regresar sí o sí.
Con For Now, DMA’s ha hecho un disco donde mejoran, buscan y encuentran nuevos aspectos de producción, de arreglos y de cómo lustrar su música para tener un acabado un tanto distinto.
Rid Of Me de PJ Harvey es una bestia feral que respira, enseña los dientes, y se abalanza sobre su presa sin contemplaciones. Como los seres humanos, pues.
Cuando el soundtrack de tu documental trae más cosas interesantes sobre la mesa que tu nuevo álbum de estudio (Aztlán), entonces hay un par de situaciones que se deben resolver.