En vísperas de loa Juegos Olímpicos de Invierno en Sachi, Rusia, era evidente que el movimiento de Pussy Riot saliera a manifestarse debido a la opresión que existe por parte del gobierno de Vladimir Putin en contra de cualquier manifestación artística y la homosexualidad.
Ayer se hizo un evento en Nueva York por parte de Amnesty International llamado “Bringing Human Rights Home” en donde Madonna introdujo a Nadezhda Tolokonnikova y Maria Alyokhina para ofrecer un discurso al respecto, sólo que en esta ocasión su activismo ha cambiado de rumbo al hablar sobre los derechos humanos de los prisioneros en Rusia.
Hoy, en la página oficial de Pussy Riot, publicaron una carta abierta en donde integrantes anónimos (ya que a partir de su encarcelamiento se convirtió más en un movimiento que una banda) indican que sus ideales originales como el feminismo, la resistencia contra el autoritarismo y la búsqueda de tu propia personalidad siguen en pie, aunque Nadia y Maria ya no seguirán, ya que por ahora se dedicarán exclusivamente a protestar por los derechos de los prisioneros.
Estos son unos extractos de la carta en donde explican por qué estas nuevas causas no compaginan con lo que originalmente Pussy Riot predicaba:
Sí, perdimos dos amigas, dos miembros ideológicos pero el mundo ha adquirido dos bravas e interesantes defensoras de los derechos humanos. Desafortunadamente no podemos felicitarlas en persona porque han rechazado cualquier contacto con el mundo. Nosotros respetamos su decisión y les deseamos sinceramente éxito en su nuevo campo. Estamos presenciando una coalición catastrófica para nosotros: por un lado Nadia atrae una gran atención de los medios y la comunidad internacional en donde los reporteros transmiten lo que dicen pero en realidad no escuchan. En las entrevistas hablan bajo su propio nombre y no bajo el de Pussy Riot por lo que ya no pertenecerán a nuestras actividades artísticas.
También hicieron una dura crítica al evento de Amnesty International porque no aparecerían con lugares para dar conciertos con un aviso previo, ya que motivan a los happenings y actuaciones improvisadas e inesperadas. También aclaran que en el cartel usaron a Pussy Riot como un gancho para vender boletos caros, ya que ellas se adhieren a una ideología anti capitalista, por lo que nunca cobrarían por eso.
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