Lo mejor MUTEK México 2018

Lo mejor MUTEK.MX 2018
¡XV años de Música y Tecnología!

Por Diego Álvarez Rex

Ya todos lo sabemos: el único verdadero comparativo en México con MUTEK para calidad en cartel, experiencia y asistencia son sus propias ediciones pasadas. No hay una competencia real actualmente para este evento cuando queremos bailar, sorprendernos, descubrir y sencillamente salir con las cabezas voladas (tal vez Sónar de algo de lata en 2019).

Contra devaluaciones, terremotos, cancelaciones, cambios en políticas de patrocinadores, mudanzas y quién sabe cuántas adversidades, MUTEK llegó a los XV años con un cartel que se enfocó en el nicho y en los nombres para iniciados, y si bien no trajo por vez primera a México a grandes nombres como lo venía haciendo desde su 10º aniversario, sino pareciera rescató lo mejor de varias ediciones pasadas apostando no sólo por la variedad en los nombres jóvenes como Debit, Avalon Emerson o Line Katcho, sino quemando todos los cartuchos con nombres ya más que probados como Brandt Brauer Frick, Nathan Fake, Robin Fox, Atom TM, Gaspar Peralta y Apparat.

Hubo algunas presentaciones que quedaron a deber. El regreso a los escenarios de GAS de Wolfgang Voight no cumplió la expectativa al dar un set que resultara en un A/VISION 2 que fue poco a poco vaciándose. NONOTAK Studio presentaron una pieza bastante olvidable en A/VISION 1 y un directo que ya cae en lo predecible en NOCTURNO 2. Actress pasó sin pena ni gloria con un set netamente aburrido que se ganó el desinterés unánime de Fábrica, así como la esperada presentación de Jean-Benoît Dunckel, mitad creativa de AIR que después de 20 minutos pareció estancarse sin dirección o evolución.

Rescatamos escuchar pesada disonancia y ruido en Priurent y Damien Dubrovnik, algunos ritmos procesados de Hip Hop en Varg y Freeka Tet, así como algunas colaboraciones locales inusuales pero acertadas como Camille Mandoki junto a Sissel Wincent y Amazondotcom con Siete Catorce. Tal vez no fue el gran cartel del XV aniversario que veníamos esperando, bien podríamos comparar los años pasados y antepasados como superiores al de este 2018, pero ahora lo que rescatamos fue la variedad en algunos fichajes que expandieron el horizonte de la oferta que este festival siempre nos da en bandeja de plata.

Line Katcho

Quien se robó la noche con su atmosférica presentación fue la canadiense que proyectó una envolvente mezcolanza de IDM con deconstrucciones de su rostro y diversas siluetas. Su pieza Immortelle fue un crescendo de emociones digitales que estalló en colores iridiscentes cegadores.

Lanark Artefax

Su pantalla a modo de tótem mientras mezclaba Techno Industrial detrás de una pared de humo fue justo la razón por la que amamos todo el esfuerzo en la locación. Presenciar al escocés en directo fue presenciar un pequeño pasaje de Blade Runner en carne propia. Jamás tuvo un momento flácido sino al contrario, tosco y concreto cual bólido futurista.

Errorsmith

¿Cómo logras combinar lo festivo y lo experimental a un terreno común? El berlinés de Erik Wiegand lo logra reuniendo todos sus conocimientos como inventor, desarrollador de software, DJ y productor al crear un set que posiblemente fue el más “Dance friendly” del primer Noctuno de MUTEK. Ritmos con coqueteos al Dancehall, y beats que aumentaban su intensidad lograron lo prometido: una de las mejores presentaciones de esta edición.

Prurient

El pionero y congénere de referencias en la experimentación y Drone norteamericano como Kevin Drumm y Wolf Eyes regresó a México por fin en el formato que lo pusiera en el mapa. Lo de forma de Prurient bien pudo haber sucedido en un festival como Aural, un Bestia o un Nicho pero da gusto que MUTEK haya apostado por esta faceta poco común en su oferta de la electrónica. Agresión contra el micrófono, destrucción de la sala de concierto y bocinas estalladas. No más.

Edna King

Se apoderó de la Sala B como sí de transportarla a otra dimensión se tratara. Música contundente como un martillo mientras algunos destellos y figuras sucedían en las pantallas. Su Techno experimental mezclado con oscuro Ambient fue todo un suceso que se robó a los públicos de las otras dos salas para retacar el espacio creando un momento en el tiempo de baile, luces tenues y frenesí que nos gustaría poder haber encapsulado de alguna manera.

Robin Fox

Gracias a su experiencia como creador de instalaciones, las presentaciones Robin Fox están intrínsecamente ligadas a lo visual. Lo que vimos en Nocturne fue una representación visual de cada beat, cada respiro sonoro traducido con un láser que iluminó todo el recinto dejando a todos hipnotizados y anonadados por las transiciones geométricas y colores. Fue una carta segura incluirlo en el cartel, pero vaya que vale la pena verlo cada vez que se pueda.

Brandt Brauer Frick & La Orquesta Filarmónica Mexiquense

El carismático trio alemán regresó por fin a nuestro país y por la puerta grande. Recordando aquellos grandes años de nuestra ciudad donde teníamos música de esta calidad totalmente gratuita en las plazas públicas en vez de esa hecatombe al mal gusto llamada Semana de las Juventudes, MUTEK cerró en la explanada del Museo Tamayo no con una tarde de Cumbia sino con una apoteósica velada de “Techno acústico” y Música de Cámara experimental que pasó de lo orgánico a lo robótico.

Sin duda de lo mejor que nos ha regalado el festival en todas sus ediciones ya que como una obra comisionada con meses de anticipación, el trio se acopló a la orquesta volviéndose un extraño robot compuesto de violines, xilófonos y teclados que cautivó, enamoró pero sobre todo dejó en claro que la música no está peleada consigo misma, sino orquestas, productores de Techno y quienes sean pueden sacar lo mejor de ella y vivirla con toda la euforia que merece.