Reseña: The Sinking /// Roaring Silence of the Diamond

July 19, 2019

Roaring Silence of the Diamond

The Sinking
Roaring Silence of the Diamond
Hole Records
7.0

Por Stephanie Rosales

Más que un acto de ocio, la expresión creativa suele ser una necesidad, y en el caso de The Sinking, proyecto en solitario del también bajista de Tajak, este segundo LP representa claramente todo lo que en previas aventuras musicales no pudo expresar.

Roaring Silence of the Diamond esté compuesto de varios temas instrumentales que, casi de manera imperceptible, nos introduce a un viaje a través de cielos azules, lagos de agua cristalina y eso que has querido enterrar en tu memoria pero no has tenido éxito.



Moon is Smiling” parece contarnos el desenlace y siguiente paso de su LP previo, Cosmic Giggle; una historia de amor y amistad entretejida por la suave ocarina de Andrés. Y para este punto, es inevitable sentirse atrapado; sin embargo, el plato fuerte del disco está a punto de llegar. “Dans ma Chambre (Reverie)” se trata de una canción tan poderosa que incluso es capaz de doblegar al más duro con casi 15 minutos de instrumentalización.

In the Realm of the Senses“, suena mientras escuchamos con el corazón en la mano. Si bien la temática de sus canciones y las características de sus composiciones previas siguen ahí, es más que evidente la maduración del proyecto. Se nota claramente la producción seria y que, a diferencia de su material pasado, estuvieron metidos en la consola puliendo hasta el último detalle teniendo una vez más a Ñois, también integrante de Tajak involucrado, y a Camedor, miembro de Lorelle Meets the Obsolete en la masterización.

The Sinking busca crear un sonido pulcro y armónico pero a la vez hipnótico. “Optimistic Chaos”, incorpora sonidos disonantes y mantiene la idea de una travesía que logra sacarnos de la monotonía de nuestras rutinas diarias. Posteriormente, la oscuridad de “You Just Smile at Me” es recitada por lo que parece ser la grabación atmosférica de una habitación capaz de incomodarte un poco en tu asiento.

Ya cerca del final, “Jardín” continúa con lo construido hasta el momento, como un bote que te conducen a la calidez del tema que le da nombre al material, el cual, entre reverberaciones, te recibe y conforta mientras sacas de tu sistema eso que siempre has querido gritarle al mundo.

Ciertamente no se trata de un disco experimental muy innovador, por momento pareciera que varios experimentos sonoros bien pudieron complementarse entre si para crear algo más complejo, pero lo que si es que este esfuerzo para nada escatima en calidad, originalidad y grandes aportaciones.

Sumamente distante a lo que hace con Tajak, este segundo material de larga duración valió la larga travesía, ya que es posiblemente el material de mayor duración editado por Hole Records, sello que con este tipo de lanzamientos se va posicionando como la disquera más propositiva que tiene hoy día nuestro país.

Post escrito por: Stephanie Rosales

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