Reseña: The Avalanches /// We Will Always Love You

December 11, 2020

The Avalanches We Will Always Love You

The Avalanches
We Will Always Love You
Modular
9.0

La versatilidad del año más versátil de la historia

Por Lecce

Amo la “reciente” corriente de trabajar discos enteros. Esta nostalgia de inicios de siglo por trabajar de la misma manera que sea hacía en los 90s. Eso o solo estamos ante un entrópico homenaje al Since I Left You, como si ese álbum debut fuera el inicio de lo que  20 años después evolucionara a un disco de 25 tracks que “homenajea” de manera notable un año tan único, pero al mismo tiempo fuera un nuevo OST para más de una generación.

El lineup de los featurings es una oda que le mete dos vueltas y media a cualquier sueño discográfico de Damon Albarn y Gorillaz. La vanguardia, realidad, futuro y pasado de la música que ha definido los últimos 25 años suena en We Will Always Love You.



El disco inicia con “Ghost Story” y el intersticial sonido de la distancia que hace referencia a Orono Noghuchi de Superorganism a través de un mensaje intermitente que liga a una especie de Neo Góspel en “Song For Barbara Payton“, un track dedicado a la actriz estadounidense y su turbulenta relación con el alcohol; sip, así de turbulento como pasaste este año, querido lector.

We Will Always Love You” forma parte de la avanzada de sencillos con la que la banda de Melbourne colabora con Dev Hynes para dar un sonido que continua navegando con el sampling noventero, con toques notables de Trip Hop pero con el avant garde que las vocales de Blood Orange representan. Luego el sentido de pérdida este año se acompaña con un track como “The Divine Chord”, como si este año solo se hubiera llevado de una manera “divertida e irónica” todo eso que alguna vez nos hizo felices, MGMT y Johnny Mar en controles de este track que Andrew VanWyngarde conecta de manera profunda con “Solitary Ceremonies“.

Tengo la firme creencia de que las modas son cíclicas, “Interstellar Love” es un ejemplo; con un sampleo de “Eye On the Sky” y la voz de Leon Bridges, la canción podría narrar las diversas y ahora cotidianas formas de amar, a distancia, sin tocarnos o de formas que no pensamos, como prediciendo inclusive el amor en el espacio. Como si el vacío emocional regresara, aparece “Ghost Story 2” un puente vocal de Bridges y Noghuchi para recordarnos el existencialismo de cualquier sentimiento.

No se si este es un disco conceptual, lo dudo mucho. Pero si es un disco teatral, un disco que para “Reflecting Light” y, su encore, “Carrier Waves” podría marcar el inicio del segundo acto de la mejor obra que jamas se ha escrito. A partir de aquí el disco comienza a tener la alegría “irreverente” de los 90s con la capacidad de asombro de los 00s.

No debe de ser fácil la búsqueda de la trascendencia espiritual, ni siquiera la constante búsqueda de la trascendencia personal lo es pero con una mezcla groovy que me recuerda a un Kula Shaker en la mejor película Funk es como Perry Farrell liderea “On The Sunn!“, canción donde comenzamos dicha trascendencia rítmica que complementa el hipotético primer acto mostrado en las canciones previas y como el mejor karaoke non stop es como pasamos a “We Go On“, porque si de búsqueda de vitalidad hablamos, nada como la perseverancia y la luz mencionadas en estos dos temas.

Star Sog.IMG” y sus 10 segundos de “madurez” nos llevan a la mitad del disco y una nueva muestra de la riqueza musical de la última década del siglo XX, a través del Dub y las vocales de Tricky, esta suena en “Until Daylight Comes“. Ya en las bajas frecuencias y con sus nuevas generaciones tomando el control es como nos enlazamos a la épica ‘Wherever You Go’ como haciendo una analogía de la estafeta que ahora lleva Jamie xx con Neneh Cherry y CLYPSO en las vocales; cerramos este rush generacional con “Music Make Me High” y un disco House que teletransporta a una fiesta parisina de fin del siglo pasado.

Como una dulce resaca a la realidad nos cae “Take Care In Your Dreaming” con tres joyas vocales: Denzel Curry, Tricky y Sampa The Great. Con este tierno mensaje podríamos dar por terminado nuestro hipotético segundo acto.

Incia “Overcome”, como una visión de lo que sigue, pero como si esta se encontrara en una especie de lado B traída desde el pasado del Since I Left You, de aquel lejano año 2000, tan empático al actual y apocalíptico 2020.

Este tercer acto “renacentista” (apelando a un mero acto de regeneración y no al periodo) sigue con la platicada y esperanzada “Gold Sky” en la voz de Kurt Vile; le sigue “Always Black” que es como el soundtrack de tu sueño de cuarentena, del como ganaste/perdiste un año, un tiempo, de como invertiste la realidad y ahora en voz de Pink Siifu tiene soundtrack.

El fin del disco se acerca y casi calculado como un breve y/o anunciado final es como la voz de Karen O se cuela en una canción con tan apropiado nombre como “Dial D For Devotion“. Después y como si solo una pausa sucediera es como River Cuomo se une a Siifu para probablamente el track más Pop del disco: “Running Red Lights“, que homenajea “sin querer” a todo un sentimiento de liberación californiana, como si esto fuera TikTok o lo que necesitara el final que se aproxima, para el disco y para el año.

Como si este disco fuera mi biografía es como llegamos a “Born To Lose“, un track también traído del más profundo y bailable rincón musical de inicios de siglo.

El track 24 es probablemente la colaboración que más esperaba. Los 6,848 km que separan Japón de Australia se nulificaron con “Music Is The Light“. The Avalanches y Cornelius trabajando un track junto Kelly Moran, el casi cierre perfecto sobre la analogía que presenta la constante experimentación y la casi obligatoria necesidad de la reinvención. Un track que puede acompañar sus noches más bajas con un sonido post rock que estimula el oido.

El disco cierra con “Weightless‘” y el regreso sonoro a la incertidumbre, esa que no se acaba con el año, esa que puede hacernos regresar a un loop de este disco y de nuevo a su primer track.

El tercer disco de The Avalanches representa un tatuaje sonoro que sin quererlo marcó mi año, lo sonorizó como si cada dos o tres tracks reviviera, sufriera, amara y gozara todos los sucesos, mensajes y aprendizajes que me llevo al futuro. Hola We Will Always Love You, hola 2021.

Post escrito por: Lecce

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