Entrevista /// Polaris: la reinvención artística a través de pasajes sonoros

Cortesía Universal Music

Pablo Cantú lanza 1.5, primer material de larga duración de su proyecto solista Polaris. Un disco que desentraña sus influencias y pasajes más personales. A través de la creación de ambientes y elementos digitales, Pablo busca desafiar cualquier pre concepción sobre su hacer musical.

Por Enrique Cruz

Polaris es el nombre con el cual Pablo Cantú (baterista de Reyno) ha bautizado a su proyecto solista. Durante 2020, Pablo, buscó una manera de revisitarse a sí mismo, de reencontrar ese deseo y voluntad adolescente por romper horizontes y límites. A través de un hilo casi nostálgico, el primer álbum de Polaris, 1.5, es un viaje sonoro que busca la reinvención como principal objetivo.

“Todo ha sido un proceso hasta cierto punto muy natural, es un ciclo de re invención que me era necesario como artista. Al final del día es cambiar tu forma de acercarte a la música, de buscar horizontes distintos. Me cansé de tocar la batería, porque no soy un baterista superdotado, por lo cual a veces mis ideas creativas llegaban, inevitablemente a los sitios de siempre”.

“De escuchar música de Charly García, de todas las secuencias rítmicas programadas, llegue al punto de crear amalgamas que, para mí, como baterista serían muy difíciles de ejecutar, pero, que creaban una diferenciación clave entre lo que podría sonar a Reyno y lo que implica Polaris”. Palabras de Pablo Cantú en entrevista para Me Hace Ruido.

Cortesía Universal Music

La presión de dejar atrás un proyecto colectivo y emprender una aventura en solitario siempre es un proceso de retos y cambios. Pablo, habla sobre las implicaciones y desafíos que trae consigo asumir un el rol como la mente única detrás de Polaris y la presión que implica que tu música llegue a la gente.

“Es un aspecto de incertidumbre, porque al final del día tú te conviertes en tu crítico más acérrimo, hubo canciones en las cuales re escribía versos hasta cinco veces y no me sentía conforme con el resultado final, después, veía a alguna persona en redes sociales citando y haciendo suyo ese verso que igual y a mí no me convencía. En ese momento deje ir esa aprehensión que tienes hacía tu música, te vuelves libre y esa sensación de libertad se convierte en algo incomparable”

Trascender más a allá de una agrupación como Reyno, una de las bandas más importantes de la escena alternativa en México de los últimos diez años, es una aventura complicada, las comparaciones son inevitables; sin embargo, el sonido de Polaris busca salir de la zona de confort y de la fórmula que ya pre concebimos. Un sonido totalmente orientado a elementos digitales, poniendo capas delicadas de toques orgánicos que se terminan mezclando en un resultando sumamente interesante.

“Siempre voy a aceptar a Reyno como algo que me forjó como músico y que influyó en mi manera de acercarme a las composiciones, obviamente que existirán puntos en común, por ejemplo, en una cuestión melódica. Pero mi búsqueda con Polaris es encontrar un fin distinto, que explore cosas diferentes a las que podría hacer con Reyno, al final, no tendría caso crear algo aparte de lo que ya conoces si el resultado va ser el mismo”. Finalizó.