Cortesía Laura Villegas (OCESA)
Cortesía Laura Villegas (OCESA)
Cortesía Laura Villegas (OCESA)
Cortesía Laura Villegas (OCESA)
Cortesía Laura Villegas (OCESA)
Tame Impala @ Palacio de los Deportes:
El público mexicano su mejor medicina
Kevin Parker y compañia regresaron a la CDMX dos años después que lo vimos en el Corona Capital 2021 en donde la gran mayoría quedó sorprendido por el experiencia sensorial de su aro de luz (sabemos que muchos actos electrónicos llevan más tiempo experimentando con las estructuras de luz) pero en esta ocasión la experiencia no fue tan agridulce como se esperaba. Un día antes, nos enteramos de que el productor se había sometido a una cirugía luego de lastimarse la cadera tras correr en un maratón. Con todo y muletas subió al escenario para tratar de darlo todo. En una declaración, dijo que su cuerpo no estaba al 100%, pero su corazón estaba con nosotros, ahí fue cuando recibió una de las varias ovaciones por parte de la audiencia mexicana durante toda la actuación.
Con esa noticia se nos avisó que la gira iba a continuar y claro hay mucho dinero de por medio: son siete fechas de las cuales dos son en México, seguidas de tres grandes actuaciones en los Lollapalooza de Argentina, Brasil y Chile así como el Estéreo Picnic más una fecha en Paraguay y aquí entra el eterno no estar conformes Si cancelaba (como Blink-182) los fans iba a estar molestos por eso desde su aparición sobre el escenario las primeras dos canciones fueron cantadas de pie haciendo lo mejor que pudo en dichas circunstancias.
Con más de una década de visitar nuestro país, hemos visto cómo el proyecto del productor ha ido evolucionando y creciendo en número de fans y más porque en el show trata de mezclar toda esa esencia del Psicodelia con la experiencia clubhouse de los 90. Fue una sorpresa que el aro u ovni de luz no lo trajera, pero sí contó con un gran despliegue de iluminación y poderosos rayos láser que enriquecieron la experiencia y se fundían con los buenos visuales
Kevin Parker siempre suele traer esa imagen desalineada y relajada muy cercano al hippismo y andar descalzo sobre el escenario, esa misma imagen enmarca su esfuerzo al estar sobre el escenario, no importa que gran parte del trabajo lo hagan los efectos, la esencia la proporciona él y sus cinco músicos que lo acompañan, esperamos de que dicha decisión de salir de tour no sea contraproducente con el tiempo y la edad.
No todo fue luces y sonido, la fiesta siempre estuvo presente y el ánimo nunca decayó, también estuvo la muy celebrada lluvia de confeti que caía en la pista del Palacio de los Deportes, los chistes cuando le lanzaron un doctor Simi, al ver aquellos videos y la estética que hace referencia a los medicamentos y su nueva droga farmacéutica llamada Rushium, parecería que esto del malestar físico se invocó para que fuera más cercano al australiano
Las actuaciones de este año arrancaron aquí en la ciudad, Kevin Parker había hecho una pausa de cinco meses para regresar de gira y poder seguir promocionando su disco de 2020 The Slow Rush, ese que por la pandemia quedó un poco en stand by, pero que cuenta con muy buenos sencillos como “Is It True“, “Borderline“, “Lost in Yesterday” y “Glimmer” que se unen a varios himnos generacionales que ya tiene la banda en estos 15 años de carrera y que todos los presentes dejaron la garganta al disfrutar de “Elephant“, “Mind Mischief“, “Let It Happen” (que fue nuestro sencillo del año en 2015) y “Eventually“, se sentía escuchar un Greatest Hits. Luego de 16 canciones el encore llego con otro gran tema “The Less I Know the Better” y despedirse con “One More Hour” tema con el que abre su último disco.
Solo deseamos que el público de México sea su mejor medicina.
