Knotfest México 2016: Día Dos @ Foro Pegaso

Ambiente General

Joliette

Nothing More

Agora

Ministry

The Offspring

Arch Enemy

Deftones

Slipknot

Por Natalia Cano @nataliacanoMX
Fotos Iván Castillo @ivanovobeach

La espera de sus seguidores para escuchar en vivo a Slipknot el domingo fue maratónica. Mientras tanto, en el Foro Pegaso, transcurrieron diez horas de buenas dosis de riffs y diversas propuestas metaleras para todos los gustos y edades.

A diferencia de su primera edición el año pasado, en esta segunda entrega del festival creado por Slipknot, el cartel y el formato del festín metalero tuvo un considerable crecimiento, hazaña que logró reunir a poco más de 100 mil personas durante este fin de semana en la capital mexiquense para disfrutar del Knotfest México.

El domingo, la banda más esperada de la maratónica jornada fue precisamente Slipknot, quien sufrió las consecuencias del pésimo audio en el escenario principal y en dos ocasiones el show fue interrumpido. Ante la rechifla y el descontento de la gente, luego de casi 30 minutos de retraso, el vocalista Corey Taylor respondió a su público.

“Hay una falla, si el audio se va de nuevo, volveremos cuantas veces sea necesario”, expresó el cantante, quien se mostró furioso por el incidente en plena interpretación de “The Heretic Anthem”. La gente respondía con aplausos, un poco temerosa de que el espectáculo terminara y con ello sus ganas de ver a la banda por la que esperaron varias horas bajo el rayo del sol.

Pero la noche era de Slipknot y no hubo nada que detuviera a la agrupación para complacer a sus fans con un repertorio que arrancó con “The Negative One”, y continuó con “Disasterpiece”, “Eyeless”, “Before I forget”, “The Shape”, “Killpop” y la atropellada “The Heretic Anthem”.

Previamente Deftones se había coronado como uno de los mejores actos en el segundo día del Knotfest, y como sucede cada vez que visitan México, hacen de sus shows momentos memorables.

La agrupación comandada por Chino Moreno, quien portó una camiseta del equipo de fútbol Pumas, ofreció una de las actuaciones más emotivas en el marco de la gira internacional con la que promocionan su más reciente álbum, Gore. México es su casa, lo saben y lo sienten en cada una de sus visitas.

“Rocket Skates”, “Geometric Headdres”, “Be quiet and drive (far away)”, “Diamond Eyes”, “Rosemary”, “Kimdracula” y “Digital Bath” conformaron el repertorio que la banda que también integran el guitarrista Stephen Carpenter, el baterista Abe Cunningham, el bajista Sergio Vega y el DJ Frank Delgado interpretó anoche.

Moreno logró encender los ánimos cuando se acercó en tres ocasiones al público para sentir el calor de sus fans, quienes desesperados por tocar al vocalista se arremolinaban y trataban de capturar el momento con las cámaras de sus celulares.

The Offspring puso el toque Punk Rock al festín metalero. En alguna ocasión, el cantante Dexter Holland y el guitarrista Noodles aseguraron que el truco para seguir en el negocio de la música después de 20 años era el “vampirismo”. “Nosotros envejecemos y nuestro público es cada vez más joven”, señaló el guitarrista en una entrevista, quien por mucho que pretenda ocultar sus canas con tintes bicolores, los hilos plateados demuestran que hace mucho que él y sus compañeros ya entraron a los 50s.

Dexter tampoco logra disimular su edad y los kilos que le ha heredado el paso del tiempo y el Rock. Aún así logró provocar que el público le acompañara con los coros en canciones como “You’re gonna go far, kid”, “All I want”, “Come out and play”, “Bad habit”, “Why don’t you get a job?” y “Americana”.

Ministry puso el toque político al festín, con un número en el que el Tío Al, el vocalista y fundador de la legendaria agrupación de Rock Industrial, Al Jourgensen, luchó contra la figura del candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump, en la canción “Punch in the face”.

Jorgensen es un frontman espectacular. No necesita correr de un lado a otro para demostrar su poder escénico y las tablas adquiridas en tantos años activo en la escena del rock. Al cantante de origen cubano le basta instalarse sobre el escenario, tomar su atril de calavera y lanzar el primer grito de guerra como la máxima autoridad en el género del rock industrial que es.

De “Hail to His Majesty” y “PermaWar”, pasando por “Fairly Unbalanced”, “Señor Peligro” y “LiesLiesLies”, y hasta llegar a a la emblemática “Thieves”, Ministry hizo sacudir con su poderosa máquina el recinto.

Opeth y su ejecución metalera perfecta también se alzó el domingo, durante el segundo día del Knotfest México. La evolución de su música y calidad interpretativa se nota desde el primer acorde. Los suecos se han mantenido a la vanguardia desde la década de 1990, y su propuesta de Metal Progresivo gusta a propios y extraños.

Sus estructuras sonoras son francamente un golpe directo a la cabeza y su virtuosismo sale a flote apenas el cantante Mikael Akerfelt y sus compañeros pisan el escenario. Su actuación se empalmaba con la de los Deftones, así que hubo que decidir entre quedarse en el escenario principal o caminar hacia el escenario contiguo.

La invitación a Sabrina Sabrok para participar en el festival fue una decisión errónea. Su espectáculo “sadomasoquista” cae en lo vulgar, y lo explícito de los actos que presenta pueden resultar contraproducentes para un festival que se anuncia como un evento “familiar”. Dildos, trajes de charol, látigos y hombres semi fornicando son innecesarios para una fiesta metalera con un cartel musical impresionante. Su sentido morboso no ayuda en nada; por el contrario, incomoda y sobra.

Tras el éxito obtenido en esta segunda edición, el Knotfest México promete una tercera en 2017.