Festival Hipnosis 2021 @ Quarry Studios

Por mooonman

Pues sí, Hipnosis 2021 venció todas las adversidades y se proclamó como el primer festival de regreso de la pandemia al formar un gran cartel con mejorando la coherencia que ha tenido en sus pasadas ediciones con artistas como TR/ST e incluyendo leyendas como Los Dug Dug’s aprovechando el 50 aniversario de Avándaro. ¡Ah! ¿Y un detalle importante… se dieron cuenta de la cantidad de mujeres involucradas en el cartel? Estamos avanzando mucho en ello, una felicitación en especial por eso.

Luego de tomar la sabia decisión de hacerlo en la CDMX y dejar a un lado las húmedas y frías caballerizas del Estado de México, se hizo en Quarry Studios al sur de la CDMX, un lugar que se usa para grabaciones que se condicionó perfectamente con un escenario externo y uno interno que se iba alternando a pesar de que al inicio se desfasaron los horarios.

Comenzamos con Mengers, a quienes entrevistamos recientemente y que por fin pudieron presentar en vivo su reciente producción GOLLY. El inicio fue tibio pero poco a poco se fueron ganando a los presentes creando esos primeros momentos en donde uno comenzaba a recordar lo que es estar en un festival. Mostraron su agradecimiento por estar ahí y que era para ellos un sueño hecho realidad volver a pisar un escenario.

Deradoorian abrió el escenario techado, el cual contó con una excelente iluminación, sonido y pantalla. Comenzó un poco lento pero poco a poco nos fueron elevando con riffs e instrumentos de viento mientras se proyectaban imágenes de Hierve El Agua en Oaxaca y ruinas arqueológicas.

Algo que de inmediato me llamó la atención previo a que iniciara el turno de los hermanos White de Tonstartssbandht es la forma en cómo tomaba su instrumento para prepararse: desde ahí notaba que era una extensión de sí por cómo tocaba las cuerdas y crear pequeños ritmos que un pájaro envidiaría. Tienen “eso” que las bandas de hermanos tienen: una conexión y facilidad de comunicación musical que le dio una estrellita a la tarde en Hipnosis 2021.

Luego vino el set acústico de Ty Segall. Entre los comentarios que escuché es que no tenía mucho sentido por su nivel de distorsión en su proyecto y que era un “bonus” por tocar con Fuzz. Sí y no, porque las versiones desnudas de las canciones a veces nos pueden dicen muchísimo más de sus versiones originales y si uno prestaba sus oídos podría notar eso.

Debo confesar que previo al festival no estaba muy entusiasmado con La Luz por su energía baja, pero en vivo comprendí que menos es más y que con su fantasma Surf podían envolver la sicodelia de una forma linda. Un plus: tocaron justo cuando “la luz” se fue y quedó muy ad hoc. Para corroborar ese sentimiento, háganse un favor y escuchen su disco homónimo que salió este año.

Luego vino el turno de Diles que no me maten… hacían mucho “spoken word” con experimentación que ya está muy visto. Un amigo me dijo que sonaba demasiado a la banda argentina Dios y pues sí. Esto no demerita su performance pero no fue algo sorprendente o memorable.

Sugar Candy Mountain empezó proclamando el rumbo que tocaría su presentación con el cover a “Playground Love” de Air. Nos recordó mucho a Melody’s Echo Chamber y logró que el público se moviera como un campo de girasoles siguiendo su suave música.

Por su parte, nuestros favs de Lorelle Meets The Obsolete juntó a más adeptos con una presentación audaz que fue creciendo exponencialmente y cerró con el público en la mano de su estridente sonido. Nos da mucho gusto ver cómo han ido dictando su destino y que estén contentos con ello.

Me disculparán pero para Fuzz fui a comer y sólo pude escucharlo de lejos. Muy a tono del concepto Hipnosis.

Uno de los aciertos de Hipnosis 2021 fue ver a Los Dug Dug’s, quienes fueron una de las bandas que fueron creando camino para el Rock nacional. Lejos del urbanismo de Lora y más cerca de la conciencia del poder del pueblo, la banda ganó el respeto de nuevas generaciones, quienes encontraron en su sonido recuerdos de los Hives o Strokes por sus riffs netamente rockeros, lejos del bla bla de Bátiz porque hablaban por sí mismos.

Algo raro pasó con La Femme, no sabemos si fue la forma en cómo estaban ecualizados pero no se escuchaban bien sus voces y detalles de su distintivo sonido. Paradigmes es un disco ambicioso en su carrera que le dio variedad a su carrera, pero no sabemos aún que tanto de este buffet de nuevos sonidos quedarán en la memoria o se olvidarán. Eso sí, escuchar sus ya clásicos “It’s Time To Wake Up“, “Sur la planche” o “Antitaxi” siempre será motivo de brincotear y bailar.

No cabe duda que TR/ST ya tiene una muy fiel fanbase en México que ha obligado a que haga dos conciertos en un día o que hagan un “flashmob” al aparecer en distintos festivales donde se ha presentado. Robert Alfons tiene un misticismo único que logra transmitir en sus beats y oscuridad Dance.

El costo del estacionamiento y el frío nos hizo emigrar y perdernos Monolord, pero podemos garantizar que éste fue un gran regreso y que le inyectará vida a la reactivación de conciertos y a la vida de un gran festival como Hipnosis 2021.