Reseña: Drake /// Honestly, Nevermind

June 20, 2022

drake Honestly Nevermind

Drake
Honestly, Nevermind
OVO
5.0

Drake y los zapatos Mickey

Por Lecce

Cuando el que les escribe era joven (ya ni siquiera tengo edad para decir “más joven”), mi señora madre solía comprarme zapatos de la marca Mickey porque decía que eran buenos ¿Qué los hacía buenos? Al entender de mi mamá, lo bueno era lo que duraba, así que en el contexto familiar de clase media en el que crecí en el, entonces, Distrito Federal lo “bueno” estaba mucho más ligado a lo que duraba que a la estética.

La declaración de Drake, donde habla de que probablemente no le entendimos a su disco, me hizo recordar la sabiduría de mi madre. A esto le sumamos que mi definición de “bueno” a evolucionado en los últimos 30 años.



Un intro innecesario precede a “Falling Back“, una canción que en su título comienza a definir lo que será el disco: una caída … de espaldas. “Texts Go Green” levanta con el evento “otro housesito, paps”, ahora bajo la producción del padre Black Coffee (productor y supervisor musical del séptimo álbum del canadiense). “Currents” tiene el mismo origen pero sin la misma emoción.

A Keeper” le truena la tacha al escucha para que se le baje un rato con el primer minuto de “Calling My Name“. Hasta ahora el beat de fiesta/evento genérico de marca se mantiene, no hay cambio.

El disco ve un rayo de luz en “Sticky“, producida por Carnage y RY X, seguida de mi única likeada del disco: “Massive“. Estos dos tracks me recuerdan muchas varias fiestas dosmileras; tracks poderosos y de verano.

Flight’s Booked” aburre y “Overdrive” se escucha más forzada que capítulo de La Rosa de Guadalupe. “Down Hill” nos prepara en su título para el urgente final del disco.

Tie That Binds” me recuerda a “Acredita No Véio” de Sofi Tukker y a pesar de que soy admirador de Rodrigo y Gabriela, créanme que no es un halago. Con “Liability” navegamos de manera nostálgica a las bajas frecuencias de inicios de la década pasada, incluso a un no tan lejano inicio de carrera de Drake. “Jimmy Cook’s” con 21 Savage cierra el disco con el único track que suena a Hip Hop en el disco.

Honestly, Nevermind es un disco de verano. Es el intento de la industria internacional de que el Dance regrese al pináculo que el Reggaetón le quitó. No se si entiendo el disco, mi trabajo aquí es darles mi opinión.

¿El disco es bueno? ¿Bueno para quién? Para veinteañeros que disfrutaran el Minimal Dance durante el verano ¿y lo olvidarán después? Sí, es bueno.

¿Bueno para mí? Mi mamá me enseñó que lo bueno dura, que lo bueno trasciende. Dudo que este disco lo haga.

Post escrito por: Lecce

Post Relacionados